Un grupo de activistas ha viajado a la Antártida y la han "reclamado" en nombre de los ciudadanos LGTB de todo el mundo.
Aunque el continente está protegido por tratados internacionales que prohíben a cualquier Estado apropiarse de estas tierras, los defensores de los derechos de las personas LGTB han realizado una reclamación simbólica izando la bandera del arco iris en el suelo helado de este continente.
Aaron Jackson, presidente y fundador de la organización Planting Peace, afirmó que "estaba viendo un documental sobre la Antártida y pensaba: 'Me gustaría visitar la Antártida, sería muy interesante. Tal vez me debería llevar una bandera del orgullo'".
"No lo gobierna ningún país, sólo los tratados internacionales. Ningún gobierno está a cargo de la Antártida. Pensé que sería interesante si lo declaráramos el primer continente gay-friendly. La realidad es que nadie es capaz de decirme que no lo es", añadió en tono de humor.
El grupo denunció que "en la actualidad, 76 países están violando los derechos de las personas LGTB y en seis de ellos aún se puede matar a alguien por pertenecer a una minoría sexual. Se necesita desesperadamente la visibilidad y la defensa de los derechos de las minorías sexuales". Ante estos datos, reclamaron "que esta declaración sirva como un catalizador para crear el impulso necesario para que los derechos LGTB lleguen a todos los continentes del mundo".(FUENTE:CASCARA AMARGA
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